
El Espíritu Santo ilumina el entendimiento del cristiano cuando lee las Escrituras. Los versículos a continuación describen como esto pasa: "Antes bien, como está escrito: "Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman. Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios. Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido, lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual. Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente." 1ra de Corintios 2:9-14.
Algunas personas creen que el versículo 9 se refiere al cielo, pero si estudiamos el contexto, nos damos cuenta que está hablando de las Escrituras cuando son reveladas al creyente por el Espíritu Santo. Es increíble que los seres humanos puedan las maravillas de Dios a través de Su Libro. 1ra de Pedro 1:12, cuando habla de la revelación de Dios por medio de la Biblia, dice que los ángeles desearían ver estas cosas: “A éstos se les reveló que no para sí mismos, sino para nosotros, administraban las cosas que ahora os son anunciadas por los que os han predicado el evangelio por el Espíritu Santo enviado del cielo; cosas en las cuales anhelan mirar los ángeles.”
Oremos como el salmista oró: "Abre los ojos de mi entendimiento, para que aprenda la maravillas de Tu Ley.” Salmo 119:18
1 comentario:
saludos .Lo invito a ver mi blog.Bendiciones.
Publicar un comentario