jueves, 29 de enero de 2009

LA BIBLIA - COMO INTERPRETARLA Parte 1

Recuerdo una vez en camino a Orlando, haber leído una pancarta que decía: ¿HAS LEÍDO MI LIBRO? HABRÁ UN EXAMEN. – Dios. ¡Wao! Que verdad tan maravillosa: ¡Dios ha hablado! Y no solo unas palabras, pero ¡un Libro! ¿No es eso fascinante? Entonces, ¿Cómo podemos entender o interpretar Su Palabra?
  1. Sea humilde. La Biblia dice que “El conocimiento envanece” 1ra de Corintios 8:1. El orgullo o soberbia, que es lo opuesto a la humildad, tiene consecuencias devastadoras. En Santiago 4:6 dice que “Dios resiste al soberbio, mas da gracia al humilde.” Cuando venimos a las Escrituras, necesitamos comprender que es El Dios Todopoderoso, El Creador del Universo, quien está hablando. Es un privilegio, el cual no merecemos, el poder leer y entender Su Palabra. Así que, si nos acercamos a ella con una actitud de humildad, Dios nos dará la gracia de poder entenderla, y nos bendecirá por ello.
  2. Léala para obedecerla. Acérquese a la Biblia con el propósito en su corazón de hacer lo que Dios dice. Entre mas la obedezca, mas Dios le iluminará acerca de ella. Si lee: "No mentirás,” entonces no mienta; si lee “Perdónense unos a otros,” entonces perdone. No salte a estudiar las grandes doctrinas de la Biblia, si no es capas de obedecer los mandamientos mas sencillos. Santiago 1:22 lo plantea de esta manera: “Sed hacedores de la Palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos.” Los doctores van a la escuela de medicina a aprender para practicar medicina, para ayudar a curar enfermedades, para salvar vidas. De la misma forma, los cristianos leen las Escrituras, no solo para obtener conocimiento, sino con el propósito de obedecerlas, de ponerlas en práctica.

La Biblia: ¡LA PALABRA DE DIOS! ¡No la menosprecie; léala; póngala en práctica! ¡Cambiará su vida! ¡El bendecirá su vida!

Continuará…

domingo, 25 de enero de 2009

LA BIBLIA - UN LIBRO SIN IGUAL

La Biblia es un libro tan magnífico. Es en verdad “La Palabra de Dios.” Cada vez que la estudio quedo sorprendido por su riqueza. Me recuerdo de las palabras del Apóstol Pablo en Romanos 11:33-36 ¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? ¿O quién le dio a él primero, para que le fuese recompensado? Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.”

Cada palabra de la Biblia es inspirada por Dios, no solo cuando dice “Así ha dicho el Señor…” Aún las comas y los puntos están ahí porque así Dios lo propuso. 2da de Timoteo 3:16 dice: “Toda la Escritura es inspirada por Dios, útil para ensenar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia.” Fíjese que dice “Toda” la escritura, no solo parte. Jesús dijo en Mateo 5:18 “Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido.”

Hay 3 palabras muy importantes que debemos entender cuando consideramos las Sagradas Escrituras:

1. Revelación Bíblica: Dios revela o descubre verdades que de otro modo el hombre no podría comprender. Dios ha descubierto todo el cuerpo de verdades que el hombre necesita a través de la Biblia. Deuteronomio 29:29 dice: “Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de esta ley."
2. Inspiración Bíblica: Dios impartió las palabras exactas que El quería que aparecieran en las Escrituras a ciertos hombre a través del Espíritu Santo. 2da de Pedro 1:21 dice: “porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo."
3. Iluminación Bíblica: es el trabajo del Espíritu Santo, el cual abre el entendimiento espiritual del creyente para que pueda comprender las Escrituras. Juan 16:13 dice: “Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad.”

¿Quieres conocer la mente de Dios? ¿Estás listo para descubrir el plan maravilloso que El tiene para tu vida? Comienza hoy y abre Su Libro. Pídele que te ilumine tu entendimiento espiritual a través de Su Espíritu Santo; descubrirás la Verdad que cambiará tu vida.

jueves, 22 de enero de 2009

LA VOLUNTAD DE DIOS PARA TU VIDA - Parte 7

Entonces, ¿qué tan importante es nuestra misión? Para ponerlo en perspectiva, considere la obra de redención. Piense en lo que Dios sacrificó para salvarnos. Imagínese si usted fuera un científico y descubriera la cura para el cáncer. Usted de inmediato la compartiría con el mundo entero para tratar de salvar el mayor número de vidas posibles. Bueno, nosotros tenemos la cura para la separación eterna de Dios, la cura para la muerte espiritual. Juan 8:24 dice: “Por eso os dije que moriréis en vuestros pecados; porque si no creéis que yo soy, en vuestros pecados moriréis.” Cada minuto hay personas muriendo sin creer en Jesús. Según Jesús, esa persona, si no ha creído en El, va a estar separado de Dios eternamente.

Romanos 3:23 dice: “Por cuanto todos han pecado y están destituidos de la gloria de Dios.” Romanos 6:23 dice: “porque la paga del pecado es muerte, mas el regalo de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.” Necesitamos comprender que. Sin Jesús, la gente está perdida. Necesitamos comprender que hay un personaje que es real, llamado satanás, cuyo propósito es destruir, matar. Juan 10:10 dice: “El ladrón viene para robar, y matar, y destruir; Yo he venido para que tengan vida, y vida en abundancia.”

Hay muchas causas nobles en esta vida; el soldado pone su vida aún al punto de muerte por razones patrióticas; el doctor pasa muchos años dedicado a los estudios para prevenir y curar enfermedades. Los discípulos de Jesús tienen la importante misión de compartir el evangelio de salvación eterna.

martes, 20 de enero de 2009

LA VOLUNTAD DE DIOS PARA TU VIDA - Parte 6

Repacemos lo que hemos cubierto hasta ahora. Hemos dicho que:
• Hemos sido creados para tener una relación personal e íntima con Dios
• Hemos sido creados para vivir para El
• Hemos sido creados para darle gloria
• Hemos sido creados para llevar fruto
• El deseo de Dios es la redención de todos los seres humanos

Hoy aprenderemos que El quiere usarte a ti y a mí para llevar a cabo Su plan de redención. Imagínese, el Gran Yo Soy, el Creador de Universo, el Rey de reyes y Señor de señores le ha escogido a usted para incluirlo y darle una misión que sobrepasa cualquier otra misión en este mundo. Hay muchas causas nobles, como ser un doctor, o darle de comer a los hambrientos, pero estas solo alcanzan niveles de ayuda al cuerpo humano. Dios nos ha llamado para participar en la más grande de todas las misiones: la redención del alma humana, la salvación eterna de personas de un estado de separación eterna de Dios en el infierno, a un estado de comunión eterna con Dios en el cielo. No hay causa más grande y noble que esta. El nos ha dado la responsabilidad de llevar a cabo la Gran Comisión.

En Mateo 28:18-20, Jesús dijo a Sus discípulos: “Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id y haced discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo, enseñándoles que guarden todas las cosas que yo os he mandado, y he aquí, Yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.” Marcos 16:15 dice: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.” En Lucas 24:46-48 dice “Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese y resucitase de los muertos al tercer día y que se predicase en Su nombre el arrepentimiento y el perdón de los pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén. Y vosotros sois testigos de estas cosas.” Y en Juan 17:18 dijo al Padre: “Como tu me has enviado al mundo, así yo los he enviado al mundo.”

El discípulo de Cristo tendrá llenura en su vida cuando lleve a cabo la misión de Dios de redención. 2da de Corintios 5:18-20 dice: “Y todo esto proviene de Dios, Quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación, que Dios estaba en Cristo, reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de reconciliación. Así que, somos embajadores en el nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros, os rogamos en el nombre de Cristo: reconciliaos con Dios.”

No tardes, estas palabras son para ti y para mí. Corramos con ellas; pongámoslas en práctica, y que el Señor te use a ti y a mí grandemente para expandir Su reino.

miércoles, 7 de enero de 2009

LA VOLUNTAD DE DIOS PARA TU VIDA - Parte 5

Aquellos que han leído la Biblia por complete pueden ver claramente que después de la caída del hombre y a través de la historia, el deseo de Dios es la redención de nuestras almas. Hay muchos pasajes Bíblicos que acentúan esta verdad. La mayor demostración de esta verdad es Jesús. Dios se convirtió en carne (Juan 1:14) con el propósito de salvarnos. Un versículo central que demuestra esto se encuentra en Juan 3:16: “Porque de tal manera amó Dios al mundo que dio a Su Hijo unigénito, para que todo aquel que en el crea, no se pierda mas tenga la vida eterna.”

Hay otros 2 pasajes que son clave para el entendimiento de la voluntad y el deseo de Dios. 1ra de Timoteo 2:3-4 “Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad.” Y 2da de Pedro 3:9 “El Señor no tardará Su promesa, como algunos la tiene por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.”

Esto nos lleva a un punto importante donde necesitamos entender que dentro del deseo y la voluntad de Dios, El ha planeado incluirnos en Sus propósitos. El quiere usarte a ti y a mi para llevar a cabo Su plan de redención. Explicaremos esto con mas detalles en los próximos artículos.

lunes, 5 de enero de 2009

LA VOLUNTAD DE DIOS PARA TU VIDA - Parte 4

Ahora, hay una manera práctica de entender y participar lo que significa darle gloria a Dios, y tiene que ver con algo que Dios nos mandó a hacer. Fuimos creados para llevar fruto. Jesús dijo en Juan 15:8 estas palabras: “En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto y seáis así mis discípulos.” Dios te creó a ti y a mí para llevar fruto; tal como una planta crece para que eventualmente madure y naturalmente de frutos, así nos hizo Dios.

Dios quiere ver fruto en todas las áreas de nuestra vida, no solamente nuestro carácter cristiano, viviendo una vida llena de amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza. El quiere también que participemos en alcanzar a otros con las Buenas Nuevas del evangelio, y quiere que esas vidas ganadas crezcan en El y para El. Esta área de llevar fruto para El, es donde nos concentraremos más a fondo.


Leemos en Juan 15:16 (Jesús hablando): "No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.” Descubriremos el significado verdadero de la vida, una vez que nos envolvamos en la obra para la cual El nos ha llamado. Jesús quiere que tú y yo experimentemos una vida abundante. El dijo en Juan 10:10 que El ha venido para que tengamos vida, y vida en abundancia. Esa vida es apreciada una vez que vivamos de acuerdo a ese propósito para el cual El nos creó.

En el próximo artículo, aprenderemos acerca del gran deseo de Dios, y del plan para llevar a cabo ese deseo. Tú y yo formamos una parte muy importante de ese plan.

domingo, 4 de enero de 2009

LA VOLUNTAD DE DIOS PARA TU VIDA - Parte 3

Hasta ahora hemos visto lo siguiente:
- Fuimos creados para tener una relación personal con Dios
- Fuimos creados para vivir para El

La Biblia también nos enseña que fuimos creados para glorificar a Dios (para darle gloria.) 1ra de Corintios 10:31 dice “Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.” Ahora bien, este es un concepto que pareciera un poco abstracto. ¿Qué significa glorificar a Dios? ¿Cómo glorificamos a Dios? Para ponerlo en perspectiva, si yo fuera a recibir la gloria por algo que yo he logrado (digamos que yo soy un buen chef, y que la gente disfruta mucho mi cocina) yo diría acerca de mi que soy una persona creativa, que me gusta inventar. Diría que soy inteligente y que trabajo duro, sin la ayuda de otros. Yo recibiría todo el crédito, porque quiero que la gente se enfoque en mí. De otra manera, si quiero darle la gloria a Dios, yo diría que mis talentos, inteligencia y habilidades para cocinar son dados por Dios. Yo no recibo el crédito, Dios lo recibe. La atención no está enfocada en mí, pero en Dios.

Me recuerdo de un pasaje en Deuteronomio 8, donde el Señor advierte a los Israelitas, que una vez que entraran en la tierra de Canaán y que sus vidas comenzaran a prosperar, no se olvidasen del que los sacó de Egipto, de Aquel que proveyó todas sus necesidades cuando estaban en el desierto, y que El es el que da la habilidad de prosperar. Los siguientes versículos son clave para entender lo que significa darle la gloria a Dios: “17 y digas en tu corazón: Mi poder y la fuerza de mi mano me han traído esta riqueza. 18 Sino acuérdate de Jehová tu Dios, porque él te da el poder para hacer las riquezas.”

Así que, traigamos gloria a Dios a través de lo que decimos, como actuamos, como pensamos. Reconócele y hazle notorio en todo lo que piensas y haces. Hazle manifiesto a otros, apunta a otros hacia El dándole el crédito por todo lo que dices y haces. Glorificar a Dios significa que nuestro corazón está lleno de gratitud, pues es El quien nos da todo lo que poseemos (material e inmaterial.)

viernes, 2 de enero de 2009

LA VOLUNTAD DE DIOS PARA TU VIDA - Parte 2

En el último artículo “La Voluntad de Dios para tu Vida,” expusimos que Dios nos creó para que tuviéramos una relación personal e íntima con El. En esta segunda parte veremos que Dios nos creó para que vivamos para El.

Colosenses 1:16 dice “Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él.” Para poder vivir una vida llena de plenitud, para poder experimentar propósito y comprender el significado de la vida, necesitamos comprender que no estamos aquí para vivir de una manera egoísta. Fuimos creados para vivir para El. Si no comprendemos esta verdad, nuestras vidas estarán llenas de disolución, y no le encontraremos sentido a nuestras vidas. Podremos pasar muchos años persiguiendo una carrera profesional, o en busca de más y más dinero, o tal vez es nuestras relaciones familiares o amistades, o aún tratando de vivir sacrificadamente por alguna causa noble, pero ir tras todas estas cosas nunca satisfarán nuestras vidas por completo. No me malentienda, estas cosas son necesarias en la vida, pero no son la razón principal de vivir.

Jesús dijo: “Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí y del evangelio, la salvará.” ¿Podría ser que al final de nuestras vidas, después de haber perseguido y vivido para otras cosas, en vez de Dios, nos demos cuenta que malgastamos nuestras vidas? De otra manera, aquellos que vivieron para Jesús, entenderán que hicieron la decisión correcta de vivir para El.

2da de Corintios 5:15 dice: “y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos.”

Solamente tenemos una oportunidad en esta vida; no la malgastemos. ¡Vivamos nuestras vidas para Jesús! No lo lamentarás.

jueves, 1 de enero de 2009

¡FELIZ AÑO 2009!

¡El 2009 ya está aquí! Nuevas aventuras comienzan, nuevas metas, nuevas resoluciones, nuevos sueños, nuevos retos… Una cosa es cierta, cualquier cosa que traiga el Nuevo año, si eres un discípulo, ¡Dios está contigo! ¡Emanuel! Sus promesas son verdad. Dios dice: “Yo estoy contigo siempre” Mateo 28:20, “No te desampararé, ni te dejaré” Hebreos 13:5.

No solo está El con nosotros, sino que El está por nosotros. La Biblia dice “si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?” El quiere verte triunfar en esos planes que El tiene para ti. Escucha cuidadosamente como El te está guiando. Recuerda que Dios está siempre trabajando, y El quiere que tu participes en lo que El hace. Recuerda que El nos habla por medio de Su Palabra, a través de Su Espíritu Santo cuando oramos, a través de las circunstancias, y a través del consejo de cristianos sabios que nos rodean. Está atento a Su voz; decide obedecerle.

¡Nuestras oraciones para contigo es que tengas un año muy bendecido!